Toni es un joven dramaturgo con un futuro prometedor. Una noche, aparecen unas goteras en su techo. Lo que debería ser un simple accidente doméstico, se acaba transformando en el momento más importante de su vida, cuando descubre que su vecino es él mismo treinta años más tarde. Las cosas en en futuro no parecen haber ido como él se imaginaba y las dos réplicas intentarán modificar lo que ha fallado en el presente, para conseguir así el mejor futuro posible.
A partir de los diálogos y los juegos escenográficos, la obra pretende viajar a través del tiempo, mientras intenta reflexionar sobre el significado de hacerse mayor, la lucha entre las expectativas y la cruda realidad y el valor del éxito. Y todo ello sin perder de vista la comedia.